Querido Diario:
Tenía planeadas dos fechas en Mérida desde hace unos cuatro meses atrás, pero como faltaba mucho no sabía exactamente cuando se realizarían hasta que comenzaron a acercarse los días…
Como uno a veces vive a prisa y no te da tiempo de planear mucho, no me di cuenta que las fechas en Mérida me partían un poco mis vacaciones, pero hay momentos donde tenemos que verle el lado positivo a las cosas y en vez de trabajar, yo iba a Mérida a vacacionar.
Recuerdo la última vez que estuve en este estado tan maravilloso, pocas personas lo saben pero me ha tocado visitar mucho Yucatán por mi trabajo. Hubo incluso una vez cuando estaba de reportera en el programa “Hoy” y me mandaron a hacer 16 reportajes.
Visité un poco de todo: Celestún, Río lagartos, Las Coloradas y El Cuyo, El Palmar, Chichén Itzá, la ruta Puuc, Telchac, Uxmal, Valladolid, Mayapán, el proceso del henequén, haciendas como Dzoyolá, Ek´Balam, y algunos cenotes en donde hasta practiqué espeleobuceo (buceo en cavernas).
Como podrán ver, he sido muy afortunada de haber conocido este estado de la A a la Z. La producción me dejó abandonada en el hotel 1 mes mientras llegaban ellos a transmitir, así que yo aproveché y visité lo más que pude, pero eso sí, estaba negada a la gastronomía yucateca. Había algo en los condimentos que automáticamente me causaba una indigestión y una panza de embarazada de 18 meses. Pero esta vez todo fue diferente.
Primero quiero agradecer a todas las personas tan hermosas que se reunieron en “La Inalámbrica” durante el martes y el miércoles celebrando a todos los niños en su día. Se me salieron las lágrimas de ver todo el amor y cariño que me demostraron. Regalos, cartas, fotos y muchos halagos son los que me llevo de esta visita. No daba crédito de todo lo que vivía y cada día me sorprendo de cómo es la vida, ahora no iba a hacer reportajes, ahora iba a dejar apapacharme y convivir con ustedes, y así fue.
Regresando al tema de la gastronomía, la última vez que visité Mérida la pasé muy mal, cené si no me equivoco Cochinita y tuve las peores pesadillas de mi vida, por lo que me negaba a disfrutar de la comida yucateca. Sin embargo pasé algunos años sin visitar este estado tan maravilloso, y sin duda alguna mi estómago es otro.
¡No saben todo lo que comí!, aquí les dejo algunas recomendaciones que me tocó visitar, a lo mejor no soy una experta en restaurantes, pero sí en disfrutar de la comida.
Lauraviajes presenta “Guía para disfrutar Mérida”
Los Almendros: Algunos criticarán y dirán que no es el mejor lugar de Mérida, pero debido a que me hospedé en el Fiesta Americana, no tuve mucha opción por lo que disfruté mucho de una botana yucateca que consistió de: Codzitos, salbutes, papadzules (pavo y cochinita), sopa de lima, y unos buenos tacos de cochinita con su cebolla morada. La verdad creo que pedí un poco de más.
Mercado de Santa Ana: No tengo mucha descripción: en el puesto que quieras, a la hora que quieras podrás disfrutar de todo tipo de platillos típicos yucatecos… (Volví a comer salbutes).
Chaya Maya: Yo no conocía este lugar, el cual por cierto está precioso y tiene dos sucursales (las dos están siempre llenísimas). Me contaban que el dueño no es yucateco, es de Turquía, pero conoció a una Yucateca en Canadá, se casaron y ahora pusieron desde hace algunos años este restaurante que es un Hit.
Aquí aprovecho para agradecer a Grupo Rivas quienes me facilitaron las instalaciones de su estación de radio para poder transmitir Ke Krees, y pues aprovechando nos invitaron a comer. Creo que aquí si me excedí y pedí una “Tradición Yucateca”: Taco de relleno negro, taco de cochinita, vaporcito (tamal) y panucho. Y si les quedó hambre, favor de pedir un helado de queso bola. ¡Lo máximo!
P.D. No dejen de probar el queso relleno, lo pidió Lore Lore y tuve que regresar a cenar jajajajaja.
La Tratto: No todo es comida yucateca, también hay lugares de comida internacional buenísimos. Aproveché para visitar a mi tía Mora y a mi prima, y me llevaron a comer a “La Tratto Santa Lucía”. No dejen de visitar este lugar, porque aparte tiene muy buen ambiente y pueden comer de todo un poco. En especial un carpaccio de res y una tártara de atún buenísima, junto a una pizza a la leña.
Debido a que estuve muy poco y ya conocía los lugares más importantes (aunque regresaré sin duda), después de todo lo que comí me sentía un poco culpable, por lo que aproveché la noche por “La blanca Mérida” y me salí a correr por Paseo Montejo. Después de disfrutar la belleza colonial de esta avenida tan hermosa, me topé con la renta de bicicletas y no dudé en irme al centro histórico en mi bici y disfrutar de la tranquilidad y seguridad que hay en este estado.
Sin duda alguna, un gran lugar para visitar, así que les recomiendo que lo hagan y aprovechen todo lo que Yucatán tiene.
P.D. 1 Subí como 10 kilos
P.D. 2 Me detuvieron en el aeropuerto por traer tantas bolas de queso como souvenir jajajajaja
P.D. 3 Gracias a todos los que me llevaron regalos, ya leí cada una de sus cartas ¡Son lo máximo!
P.D. 4 Hasta aquí lauraviajes, el siguiente es Madrid … ¡Olé!
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