Un caso de racismo ha conmocionado tanto la comunidad de Claremont, New Hampshire en Estados Unidos y ha llegado a las redes sociales lo que ha causado indignación entre la población.
Cassandra Merlin usó su cuenta de Facebook para denunciar este acto en un mensaje que después fue eliminado de la red social: “Mi hijo está siendo trasladado a Dartmouth después de que un niño de 14 años decidió colgarlo de un árbol”.
Posteriormente la abuela declaró para el Valley News que el menor jugaba con un grupo de adolescentes cuando comenzaron a insultarlo, además de lanzarle piedras y palos.
El niño fue atendido en el hospital por las heridas en su cuello, de acuerdo a un último mensaje de la madre agradeció el apoyo y que hizo pública la historia de su hijo para mostrar que aún existe odio y racismo.
La población se ha unido en oración por el pequeño Quincy y en redes sociales han mostrado el apoyo con el hashtag #JusticeForQuincy.
Incluso existe una campaña para ayudar a la madre de Quincy, desde la página ‘Go Found Me’ la cual lleva al momento más de 17 mil dólares y según la página está destinado a que tanto el niño como su familia acudan a terapia y ayuda emocional.