Madonna y su hijo David Blanda dieron la bienvenida al 2019 con un concierto en el bar Stornewall Inn, en Nueva York. En este lugar reafirmó su compromiso con la comunidad LGBTI y destacó todos los esfuerzos que se han realizado contra la discriminación y la ignorancia de cualquiera que promueva odio e indiferencia.
En el lugar cantó junto a su hijo, algunos éxitos, donde afirmó sentirse contenta de compartir el escenario con él.
Sin embargo, lo que llamó la atención de algunos detractores y fanáticos es ver el pronunciado trasero que lució durante la noche.
Aunque solo se difundieron imágenes que pudieron ser editadas para provocar un rumor, han salido a la luz diversos vídeos, donde se aprecia el tamaño pronunciado del trasero de la cantante.
Algunos han criticado esta pequeña cirugía estética que se realizó la cantante, sin embargo, continúan apoyándola en su próximo material discográfico que dará a conocer durante este año.
Pese a todo, algunos han resaltado que lo más importante, es que Madonna no ha parado de trabajar para sus fans y que una operación, no debe ser el centro de atención para la ‘Reina del pop’.