Esta chica se llama Inger y a tan sólo 10 semanas de haber dado a luz, tiene un abdomen de acero, el cual le ha costado severas críticas, debido a que durante y después de su embarazo, no dejó de hacer una rutina pesada de ejercicios.
El embarazo de Inger Houghton, estuvo lleno de buena alimentación, levantamiento de pesas, sentadillas, natación y barras.
Durante sus nueve meses compartió su proceso en el gimnasio de su casa, lo que le ha costado algunas críticas, pues afirman que puso en riesgo su salud y la de su segunda hija.
Pero debido a eso, Inger utilizó su cuenta de Instagram para aclarar todo el asunto: “Este video es haciendo pesas con 70 kg. A las 39 semanas de embarazo. No lo recomiendo a todas las mujeres embarazadas, pero me funcionó a mi (…) Me dijeron que no soy un modelo para las mujeres embarazadas ya que estoy entrenando muy duro. Las mujeres podrían lastimarse a sí mismas y a sus bebés con lo que hago. Sinceramente creo que nosotros las mujeres entrenamos con lo que conocemos y con lo que nos hace bien a nuestros cuerpos, y no copiarán a ciegas lo que hago yo”.
Pese a eso, en estos momento Inger junto con su esposo, disfrutan a lo grande al nuevo miembro de la familia, la bella Kaia.
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