Recordarás que el año pasado Selena Gomez canceló su gira Revival para atender su salud y entró en rehabilitación por las consecuencias que le trajo padecer Lupus, padecimiento que la cantante tiene desde hace ya un tiempo, el día de hoy a través de Vogue abrió su corazón al respecto.
Selena reúne todos los adjetivos para ser una estrella: es una talentosa compositora, cantante, actriz, emprendedora, es querida por sus fans y ella les corresponde, no tiene poses y siempre brinda su ayuda a quien lo pide, pero en realidad ella no se sentía así, durante una entrevista que otorgó a la revista Vogue de abril confiesa todos los aspectos oscuros que la invadieron y uno de ellos fue que al convertirse en la persona con más seguidores del mundo en la aplicación Instagram no la hizo sentir tan bien:
“En cuanto me convertí en la persona con más followers en Instagram, me asusté un poco, se convirtió en algo que me consumía. Era el motivo por lo que me levantaba y acostaba cada día. Era una adicta, y sentía que estaba viendo cosas que no quería ver, como si estuviera metiendo cosas en mi cabeza que en realidad no quería que me importaran. Siempre termino sintiéndome fatal cuando veo Instagram”.
Así fue la divertida sesión:
Tras las semanas que estuvo en rehabilitación tomó la dura decisión de borrar la aplicación de su celular, incluso no se sabe la contraseña y su asistente quien comparte cosas en la plataforma.
“La gente quería tanto que yo fuera auténtica, y cuando eso sucedió, por fin, fue una gran liberación, no soy diferente de lo que puse allí, he sido muy vulnerable con mis fans, y a veces digo cosas no debería, pero tengo que ser honesta con ellos, creo que eso es una parte importante de por qué estoy donde estoy”.
También habló sobre cómo se llegó a sentir cuando estaba de gira y la inseguridad la invadía a tal grado de no sentirse lo suficientemente buena, pues su audiencia no era la misma y no podía dar consejos:
“Los tours son un lugar muy solitario para mí. Mi autoestima fue disparada, estaba deprimida, ansiosa. Empecé a tener ataques de pánico justo antes de subir al escenario, o justo después de salir del escenario. Básicamente, sentí que no era lo suficientemente buena, que no era capaz, sentía que no estaba dándole nada a mis fans, y ellos podían verlo, lo que creo fue una completa distorsión”.
Fue en Tenesse donde se alejó del mundo, de la tecnología, de las redes y se sometió a terapias, de grupo e individual, donde se sintió cobijada y acompañada de personas que luchaban por su vida:
“No tienes ni idea de lo increíble que se sentía estar con seis chicas, personas reales que no podían decir dos cosas sobre quién era yo, alejarme fue una de las cosas más difíciles, pero fue lo mejor que he hecho”.
Ahora Selena usa Airbnb para vivir en diferentes lugares y sentirse relajada, en estos momentos está en Valley, no sale mucho, pero si da largos paseos con sus amigos y ahora solo 17 personas tienen su número de teléfono: “Tal vez dos sean famosos”. Finalizó diciendo que la terapia de conducta dialéctica, la ha ayudado a mejorar la comunicación, incorporar las prácticas de atención plena y regular las emociones:
“Ojalá más gente hablara de esa terapia, a las chicas se nos enseña a ser demasiado resistentes, ser fuertes, sexys, cool y relajadas… Pero también se nos tiene permitido desmoronarnos.”