Hace una semana exactamente les di los 8 pasos para superar esa relación que todo el mundo jura durará para toda la vida. Pues bien, a veces escogemos las peores despedidas para terminar con esa relación que ya no da para más.
Habla las cosas de frente, nunca mientas, tarde o temprano todas las mentiras se descubren y quedarás como un vil mentiroso (a), aunque esa no haya sido tu intención.
Voy a compartir una carta que encontré y la consideró una forma muy sincera de decirle a adiós a alguien que amaste en algún momento…
“Esta carta no es para decirte lo mucho que te quiero, ni para que te quedes a mi lado. Pasa que desde hace mucho, casi más de un año que me he sentido muy mal.
Tengo todo para ser feliz, familia, amigos, trabajo, independencia. Pero estoy atada a ti, algo que no me ha dejado continuar mi vida, no soy la de antes, y ya nunca lo seré.
Lo único que necesito es que te vayas de mi vida, no quiero que me busques ni que intentes saber cómo estoy, qué me ha pasado, con quién salgo, sólo necesito tiempo para poder rehacer mi vida.
Te juró que intenté ser la mejor, y cuando te escogí fue para que te quedarás siempre a mi lado, pero eso no ha sucedido… Lamento romper mi promesa de quedarme contigo para siempre, pero de alguna manera muy extraña tu me enseñaste a entender que nada es por siempre.
Gracias por tanto, en serio, contigo aprendí amar en todas sus expresiones, siempre fue un placer compartir mi tiempo a tu lado, que el mundo supiera quien eras y lo que eras para mí. Siempre te llevaré en una parte de mi”.
Pero claro, siempre escogeremos nuestra forma para terminar una relación que ya no da para más. Sea cómo sea, intenten hacerlo de la mejor manera posible, no siempre hay ganadores, realmente nunca hay un final, son pausas que la vida nos da para entender nuestra vida. ¡A darle con todo!
Deja tu comentario