El conductor de una motocicleta venía grabando todo lo que sucedía en la carretera, cuando repentinamente fue cegado por el intenso sol del atardecer, tras bajar un momento la velocidad, se estampó directo con un automóvil.
La luz del sol era tan intensa que cualquiera que vea el video es cegado por el sol; luego de estrellarse el conductor quedó tirado y la cámara grabó hasta el último momento.