El hijo del príncipe Eduardo, James, vizconde de Severn, fue sorprendido manejando a sus 10 años este lunes.
Fue en los terrenos aldeaños del castillo de Windsor que el nieto de la reina Isabel II fue visto durante las vacaciones de Pascua por algunos paparazzi, mientras manejaba un Land Rover de la familia real.
Aunque no tiene permiso para conducir, el hijo del príncipe Eduardo no llegó a romper alguna ley vial, pues el código británico establece que se considera delito si se conduce sin el permiso adecuado en la vía pública.
De acuerdo al portal Daily Mail un testigo contó que el menor manejaba una velocidad considerable en la inmediaciones del palacio, el cuál se encuentra en el condado de Berkshire, al oeste de Inglaterra y donde se celebrará la boda de su primo, el principe Harry y Meghan Markle el próximo 19 de mayo.