Las redes sociales han hecho que las nuevas generaciones intenten poner más atención a lo que publican, cómo lo hacen y qué comparten, que al riesgo que puede llevar una simple publicación que tendrá como único objetivo de ganar ‘likes’.
Jonathan Chow un chico de 17 años, intentó grabar un Snapchat que le dejaría cientos de views, sin medir el peligro al que se expondría; él decidió saltar a un pequeño “puente” dentro de un centro comercial para obtener el vídeo del año, pero las cosas no salieron como lo planeó.
El clip que ha circulado por la red, se observa al joven entregándole el celular a su mejor amiga, esta intenta grabar pero en un segundo su amigo cae y pierde la vida.
“Estábamos haciendo compras y cuando fuimos al puente, él vio para arriba y se le ocurrió hacer un truco. Ambos pensamos que la repisa era de concreto, pero cuando saltó cayó al vacío. Sabía que era peligroso, pero antes de que pudiera detenerlo, él ya había saltado. Juro que quería saltar también, pero ya era demasiado tarde”, declaró su amiga Ruth, de 17 años.
Al menos cuatro personas intentaron devolverle la vida a Chow en el centro comercial, luego fue trasladado al hospital Tan Tock Seng, donde fue declarado muerto. Jonathan estaba estudiando en Australia, regresó a Singapur en diciembre para esperar su servicio.
Desafortunadamente el chico fue noticia pero no por grabar el Snapchat más visto de todos, sino por arriesgar prácticamente su vida al mostrar un lado aventurero en una red social. El vídeo fue difundido hace unos días y ha causado gran impacto en cientos de jóvenes.
¡Cuidado chicos!