Un pequeño quiso ser un adulto y decidió cortarse el cabello, lo que no pensó es que terminaría arruinando su corte de pelo por completo.
El pequeño agarró sin decirle a nadie la rasuradora de su padre y cortó de tajo gran parte de su cabello, cuando el padre del niño se dio cuenta , decidió grabar el momento.
El niño llorando y muy arrepentido se disculpó y prometió no tomar nunca la rasuradora de papá, mientras modelo el corte de cabello que se había dejado.