El nombre de este chico es Shane Brown, él tenía la intención de hacer historia con su grupo de amigos y realizar un triple salto desde una cascada de Hawai, pero nunca pensó que terminaría gravemente herido.
Lo que comenzó como un reto y una aventura, terminó siendo una pesadilla para Shane de tan sólo 24 años de edad y para todos sus amigos que pensaron, que hacer clavados iba a ser una gran idea.
La intención era realizar un triple salto y salir ileso, claro sus amigos grabarían el gran momento, pero un error de cálculo fue determinante para que se golpeara la cabeza y se rompiera las costillas.
Cuando sus amigos vieron que no salía del agua uno de ellos se lanzó a buscarlo, al final Shane terminó en un video de Youtube, pero mostrando sus 14 costillas rotas, ambos omóplatos fracturados y una herida expuesta en la cabeza.