Engañar a alguien para que coma tarántulas, lombrices, insectos en general, parece haber pasado de moda. Lo nuevo es ser un poco “más crueles” y hacer creer a las víctimas que están comiendo un manjar (aunque no lo sea).
Una marca de comida para perro, confiando en la calidad de sus productos, reunió a un grupo de personas- de todas las edades- y decidió ofrecerles un menú que consistía en una hamburguesa con tocino, un taco de pollo y espagueti con albóndigas.
Después les pidió a los participantes que expresaran de manera abierta sus opiniones respecto al menú.
“Se ve muy rico”, “huele muy bien”, “tiene una presentación muy atractiva”, fueron algunas de las expresiones de los voluntarios al ver la comida.
¿Los quieren probar?, les preguntaron recibiendo un sí por respuesta de los participantes. –“Está muy rico”, “Me gusta mucho la carne”, “Mmm”, “los tacos de pollo están deliciosos y tienen un sabor tropical” son algunos de los comentarios, incluso un voluntario expresó: “el taco sabe muy bien, casi sabe a taco al pastor”.
“Ok chicos les mostraré el ingrediente secreto”, dicen los organizadores. “Den un vistazo” y les muestran la comida para perro. ¡IUGH!.
Pero la reacción de los voluntarios es mucho más sorprendente de lo que imaginas pues sin pero alguno, muchos decidieron seguir comiendo los guisados. ¡En especial los niños!.